El Legado de Alan García

Por: José Antonio Torres Iriarte

Alan García Pérez demostró que su liderazgo superaba las fronteras nacionales, para convertirse desde mediados de la década de los ochenta en un líder continental, que supo desde la Asamblea General de las Naciones Unidas y otros foros internacionales exponer la posición del gobierno peruano y de la comunidad latinoamericana en una coyuntura en la que la “crisis de la deuda externa” afectaba frontalmente nuestras finanzas públicas.

Alan García como Jefe de Estado alentó la PAZ en Centroamérica, el restablecimiento de la democracia en Chile y promovió la unidad de América Latina en un contexto internacional aún marcado por la Guerra Fría. En el plano nacional supo enfrentarse al terrorismo genocida y sentar las bases del trabajo de “inteligencia”, que tiempo después lograría la captura del cabecilla de Sendero Luminoso.

El aprismo bajo el liderazgo de Alan García promovió la Regionalización como Política de Estado de largo plazo, el crédito agrario y el apoyo a las Comunidades Campesinas marcaron el signo social de un gobierno inspirado en la Democracia Social. De otro lado el gobierno peruano enfrentó a los grupos de poder liderados por Mario Vargas Llosa, que se opusieron a la “estatización de la banca” en 1987. 

América Latina confrontó en los años ochenta con un proceso que fue calificado por la CEPAL, como la “década perdida” caracterizada por el sobreendeudamiento, la recesión y la hiperinflación que afectó en menor o mayor medida a los países de la región latinoamericana.

El autogolpe del 5 de Abril de 1992 interrumpió el proceso de transición democrática iniciada en 1978.  El gobierno de Colombia le concede ASILO en momentos en los que la dictadura no tenía otro objetivo que terminar con su vida. Su retorno triunfal en Enero del 2001 y su Gran Mensaje en la Plaza San Martín, HOY constituye una pieza de oratoria y de docencia política.

En las Elecciones Generales del 2001 logra el 48% de la votación nacional y cinco años más tarde es elegido en comicios, en los que tuvo que enfrentarse al candidato del “chavismo”.

El segundo gobierno de Alan García logró sentar las bases de una Democracia de Pan con Libertad; la economía nacional creció a tasas por encima del promedio latinoamericano, más de 6 millones de peruanos superaron la línea de pobreza y la obra pública en todo el país generó mejores condiciones de vida para vastos sectores de la población. La gran revolución se expresó en el surgimiento de nuevos sectores medios con acceso al crédito, la vivienda y la educación.

Desde los primeros años del gobierno de Ollanta Humala se promovieron investigaciones a su segunda administración. En los últimos dos años en especial   IDL- Reporteros y Gustavo Gorriti se han convertido en los Grandes Censores de la vida nacional. El control de los grandes medios de comunicación en manos del grupo “El Comercio” y “La República”, el evidente encubrimiento de las empresas consorciadas con Odebrecht, la protección de los grandes empresarios nacionales y la “criminalización de la política” han caracterizado el accionar del Ministerio Público y el Poder Judicial.

El objetivo político de incriminar, detener y humillar a Alan García ha quedado trunco. El antiaprismo alentado por los rezagos de la vieja oligarquía, los comunistas de AYER y los caviares de HOY y desde los grandes medios de comunicación decidieron en base a la difamación, la calumnia, a la acusación sin pruebas y apoyados en una Justicia Mediática; promover la PERSECUCIÓN contra Alan García, bajo un ropaje de investigaciones como parte de la lucha anticorrupción emprendida por el gobierno.

Una vez más es necesario enfatizar que el gobierno de Uruguay deshonró su historia y tradición  política que fue en el pasado referente de defensa de las libertades y los Derechos Humanos; cuando en un decisión VERGONZOSA el gobierno del Presidente Tabaré Vásquez decidió el 3 de Diciembre del 2018 no CONCEDERLE ASILO a Alan García  .

América Latina HOY reconoce el liderazgo continental de Alan García. La historia le tiene reservado un lugar en el podio de los VENCEDORES que están llamados a transcender en el tiempo y ser parte de la memoria de los pueblos.

Alan García supo expresar con propiedad el mensaje de Haya de la Torre en momentos dramáticos para la vida nacional. En su condición de político, maestro universitario y Jefe de Estado nos deja ÚN GRAN LEGADO que sólo puede ser desconocido por quienes han hecho del ODIO la razón de su accionar político. 

¡VIVA ALAN GARCÍA!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *